viernes, 7 de junio de 2024

Charly García. Volvió una noche

5/6/24 - Library Lounge del Faena Buenos Aires. Acompaño en 2 temas a la "Baremberg & Mojo Jam Band", Yendo de la cama al living y Cerca de la Revolución. Charly había ido con sus asistentes a acompañar a su cuñado, Facu Iñigo, que ofició de DJ durante la velada.


Después de casi dos años, Charly García volvió a actuar en público, la última vez había sido en su cumpleaños 71. Fue en el Library Lounge del Faena hotel en Puerto Madero, y el músico acompaño en la interpretación de dos de sus clásicos, “Yendo de la cama al living” y “Cerca de la revolución”, junto a la “Baremberg & Mojo Jam Band”, conjunto nucleado por el baterista de Fito Páez, Gastón Baremberg y el bajista de El Kuelgue Juan Martín Mojoli.
La semana pasada “me escribieron para contarme que Facu Iñigo [el hermano de Mecha, la pareja de Charly], iba de DJ y que Charly tenía ganas de ir”, explica Baremberg. El miércoles por la tarde, el baterista recibió la confirmación y se lo contó al resto de la banda, que se completa con Julia Agra en guitarra y Luna Suárez en piano y voz. “Viene el Maestro”, les dijo.
Cuando Charly llegó al Faena, la banda no había probado sonido. Con el lugar lleno de gente la banda interpretó un repertorio con temas de Stevie Wonder, Prince y James Brown. Relata Baremberg: “vi que se estaba cocinando todo, que Charly tenía ganas de tocar, la miro a Julia y le digo ‘arrancá con el tema García’. La gente se volvió loca y automáticamente acercaron la silla de Charly al piano”.


Baremberg ya había tocado con Charly: “Con Fito tocamos varias veces, creo que la primera vez fue en 2009 o 2010. Después, en 2013, hicimos la gira García-Páez, que primero tocábamos nosotros, después tocaba Charly, y terminábamos las dos bandas arriba del escenario. Se hicieron muy pocos shows, pero fue una locura. Igual que el homenaje a Spinetta en los premios Gardel de 2013”. “Creo que lo más importante de lo que pasó ayer, más allá de que el mundo sea un lugar mejor porque existe Charly García y porque todavía toca el piano, fue que estaba feliz. Él estaba feliz. Él tenía ganas de tocar a pesar de todo y gracias a todos. Y en un momento se da vuelta y lo único que dijo, porque era lo que más le importaba, fue: ‘¡Más volumen! Te digo la verdad, ¡no hay nada más lindo que verlo a García feliz y conectado con la música!” sentenció.

No hay comentarios:

Publicar un comentario