Pablo del Caso, el Dr. Say No More

García es asistido por su kinesióloga, licenciada Julia Sanpedro, realizando tareas para favorecer el equilibrio.

Cualquiera que lo observe hoy puede pensar que Charly García (57) se volvió un fanático del gym, la natación, el footing, la bicicleta y la vida sana. Y aunque pueda sonar un poco exagerado, ésa es más o menos la verdad. Lo que antes parecía un milagro (alejarlo de las drogas y el alcohol) hoy es una realidad.

Como muestra, va un ejemplo: es sabido que el músico es un fanático consumidor de Coca Cola. Pero el equipo de médicos que hoy lo asiste descubrió que la excesiva ingesta de esa bebida le dificultaba dormir. Entonces le sugirió la conveniencia de que después de las cinco de la tarde no tomara más hasta el otro día. Los resultados fueron excelentes: a partir de ello, García descansa plácidamente todas las noches. Y jamás transgredió aquella prescripción. Al contrario, respeta a rajatabla el organigrama que le imponen los profesionales: hasta pide permiso para fumar un cigarrillo.

El doctor Pablo de Caso, director médico del centro Reumatología Rehabilitación Hidroterapia –Francia 779, Luján–, cuyos médicos son los responsables de la recuperación de Charly, cuenta que el tratamiento que cumple es todo un éxito: “Está recuperado en un 80 por ciento. Y en aproximadamente un mes se trasladará a un departamento en Capital, cuyo edificio tiene pileta climatizada y baños sauna, esenciales para completar los tratamientos kinésicos, de equilibrio y de hidroterapia que se le practican. Y para la rehabilitación total. Siempre va a estar acompañado de sus ayudantes terapéuticos. No sabemos cuánto tiempo más llevará nuestro trabajo. Todo depende de él, y como cumple perfectamente con lo que se le solicita, el panorama es excelente”.
¿Qué dice Charly? Tiene una frase que aplica continuamente: “Siempre para adelante”, en obvia alusión a que quiere alejarse de ciertas conductas del pasado que lo atormentaron. “Estoy feliz, muy lejos de las cosas que me hacían mal”, reconoce. Cuentan que hoy ni se le cruza por la cabeza consumir drogas o alcohol; ahora se estimula a través de pensamientos que logra con la terapia cognitiva que sigue. La médica clínica que lo trata, doctora Leticia Breglia, gran soporte en lo referente a la contención psicológica/psiquiátrica, está asombrada por su evolución, ya que los tests que le vienen practicando periódicamente arrojan resultados muy favorables.
Desde hace meses vive en el campo Mi Negrita, que Palito Ortega tiene en Luján. Precisamente, en el mes de octubre la gente de Sadaic –Sociedad Argentina de Autores y Compositores–, que tenía referencias del trabajo que realizaban en el centro de reumatología, se contactó con sus autoridades y así empezó la relación.

Charly estaba siendo tratado por médicos de Capital y de Luján, y por pedido de Palito y su manager, Fernando Sereszevsky –claves en todo este proceso de recuperación–, el tratamiento se intensificó, arrojando óptimos beneficios para el paciente.
“Cuando ingresó a trabajar con nosotros no hablaba, estaba algo agresivo, tenía un parkisionismo producido por la medicación –que hasta le impedía caminar–, un cuadro depresivo severo, no se quería levantar de la cama, estaba de mal humor...”, explica el doctor De Caso. Y resume la actualidad de García hoy, totalmente contrapuesta: “Está muy bien, gracias a la contención que le brindamos desde el principio, con gran lucidez, estudios neurológicos favorables, imágenes de su cerebro excelentes y perspectivas positivas para el futuro. Es un paciente ejemplar. Aunque les cueste creerlo, ahora es tan obsesivo con su buena salud como con su música”.

Por Miguel Braillard. Fotos: diario El Civismo.

Fuente:http://www.gente.com.ar/nota.php?ID=15800