viernes, 1 de marzo de 2019

Charly García protagonizó un sólido show en el Teatro Gran Rex.


Después de aparecer en el Colón como invitado de Pedro Aznar, el genio - junto su banda oficial - dio el primer recital de 2019.

27 de febrero - Al ingresar al teatro el programa anunciaba que “La Torre de Tesla” fue el sueño de un inventor por crear un sistema mundial inalámbrico de electricidad sin cables, de energía desbordante y libre. "Tesla como una analogía de la utopía", apuntaba Charly, que a las 20.40 del miércoles comenzaba un sólido show.
Al abrirse el telón se vio al anfitrión envuelto por sus teclados, de saco negro y gafas oscuras, “Este es un mensaje de nosotros para todos ustedes”, dijo mientras sonaban los primeros acordes de “De mí”, y luego bromeaba con la letra: a la frase “no pienses que estoy loco” le agregó “estoy re loco”.
El ambiente creado fluyó con “La máquina de ser feliz” (que según él, “no funciona”), donde se sumó Rosario Ortega, de punta en blanco a la banda  integrada, además, por el Zorrito Fabián Von Quintiero en teclados, Toño Silva en batería, Carlos González en bajo y Kiuge Hayashida en guitarras.  
“El día que murió Gustavo Cerati puse un disco de Genesis al palo, realmente sentía mucha bronca. Y tenía una vecina que me empieza a tocar la puerta”-recordó García como intro para “Rivalidad- “Y yo le digo ‘señora, ¿usted en qué país vive?’. Y vino con la policía y yo saque esta cosita que mide los decibeles y además como soy ciudadano ilustre, se tuvo que ir con la policía”. Las risas celebraron el final de la anécdota y el comienzo de la canción. El dialogo entre temas continuó con la frase "Algunas cosas que pasan en este país, divinas, divinas… No puteen al Presidente, le gusta”, a lo que el público respondió con el conocido cantito anti oficialista antes que sonara “Otro”, que tuvo en la pantalla del escenario “La primavera de Hitler” del film “Los productores”.
Acto seguido al tema de Random se colgó una guitarra eléctrica y arrancó con el riff potente de “Cerca de la revolución”. Al "ole, olé, olé, Charly, Charly" del público se sumó también Rosario Ortega. "Bien que no dijeron nada político, Say No More no habla” bromeó García. Continuaron  dos de esas canciones para disfrutar sentado, “King Kong” y “Lluvia”, precedida por una inquietante frase: ¨El único video clip que hicimos del álbum y quizás el último¨.
Esta calma fue como la que antecede a la tormenta y, tras ser sorprendido por el hallazgo de un vaso con Whisky  (“¡Uy!, pusieron whisky acá”), dijo: “bueno, si Keith Richards no murió, yo tampoco", sorbo mediante y con imágenes en las pantallas que homenajeaban  su época mas “Say No More”, comenzó a soltar la letra de “No importa” con un megáfono que se iban pasando con Rosario. “¿La están pasando bien? Ahora va a venir Luis Miguel”, dijo al finalizar y ante las risas completó: “¿Por qué no? Es un chico bueno...” Después se apuntó al pecho y dijo “Rocanrol yo” en un acto de proclamación al interpretar el tema homónimo.  
Antes de  interpretar "Parte de la religión" y dando muestras de su conexión con la actualidad, volvió a aplicar su ironía: "A los asistentes los trafico de Venezuela, todo el mundo se da cuenta lo que pasa, menos los que tienen que trabajar” dijo un poco molesto por algo que no le habrá gustado y anticipando lo que vendría tras un par de temas; un explosivo "No llores por mí, Argentina" y "Cuchillos" (dedicado a Mercedes Sosa).
A estas alturas, Charly había tocado diez canciones y nadie se esperaba que el icono del Rock  se levantara repentinamente, dijera simplemente "chau, muchas gracias por todo" y se retirara del escenario del brazo de Rosario Ortega.  El resto de los músicos no sabía bien qué hacer y finalmente alguien corrió el telón.  Pero para tranquilidad de la audiencia quince minutos (y muchos cantitos contra Macri) después, García volvió con “El día que apagaron la luz”, todo hacía pensar que había sido sólo un intervalo. 
Luego García uso para introducir "Asesíname" un comentario sobre violencia de género. "¿Cómo se llama cuando un hombre mata a una chica? ¿Femicidio?", dijo él en un ida y vuelta algo desconcertante que Ortega zanjó con un "no, no es no" y el tema arrancó y sonó bárbaro, otra vez con Charly en guitarra, de la cual se quejó "¿Quién la afinó?", para rematar con un simpático "ahora tengo el oído obsoleto". En seguida un efecto “lunar” con una bola de espejos, que  llenó de reflejos plateados el escenario, acompaño la hermosa “Canción de dos por tres”.
El telón se bajó nuevamente tras las 15 canciones y no, Charly no volvió más, la Torre de Tesla había dejado de transmitir en una noche que encontró al artista, a pesar de sus limitaciones físicas, logrando cantar e interpretar las canciones del repertorio con creces respecto de otras presentaciones.
Es innegable que a los 67 años, la esencia del artista resiste intacta y su don musical no deja de encandilar. Charly García fue quizás la primer estrella del Rock argentino y posiblemente sea la única que sigue brillando.

Lista de Temas:
01-De mí
02-La máquina de ser feliz
03-Rivalidad
04-Otro
05-Cerca de la revolución
06-King Kong
07-Lluvia
08-No importa
09-Rock and roll yo
10-Parte de la religión
11-No llores por mí, Argentina
12-Cuchillos
13-El día que apagaron la luz
14-Asesíname
15-Canción de dos por tres

Hernán para Cinema Verité
PH Sandra Calandrino 

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